Y mientras tú acechas al tenebroso pasado, yo escapo de los ayeres que me hicieron daño, escapo y los convierto en una simple experiencia que navega sin apuros por el piélago del olvido; navego lento y sin rumbo tratando de observar en el horizonte algún rastro de ti, alguna silueta que me dirija de manera discreta hacia tu mirar... navego bordeando tus costas buscando donde mi nave anclar.
Puede que esté abreviando tanto sentimiento en esta redacción o tal vez evitando mencionar frases que ayer fueron leídas por quien hoy ni recuerda mi nombre... ¿me tienes presente aunque sea un instante?...; puede que todo sea mentira, que esté en esa etapa en la cual un gesto u esbozo de cariño pueden llegar a confundirse con ese gusto que perdí, con ese latido que se anhela sentir... observo tus labios cuando hablas, cuando me hablas, de tu sonrisa he extraído pequeñas estrellas para adornar mis noches a la deriva, espero en alguna de ellas mi norte encontrar.
De tus palabras he dibujado versos, de tu mirada he pintado poemas sobre mis días y todo para una situación que por ratos siento lejana, que por otro está ahí o que simplemente no existe... el ser humano se alimenta de sueños... ¿quieres ser el mío?
He mencionado tu nombre ante mi mundo y trato de hacer que te incluyas en él... sólo queda dejar que el tiempo y mis detalles para contigo logren construir una base perfecta para iniciar un lazo a largo plazo, un vínculo en el cual tú y yo juguemos a besarnos, caminemos de la mano y sonriamos luego de pelear... y abrazarnos en noches frías... y jugar a ser nosotros mientras el mundo se asombra ante lo que jamás pensó observar... yo contigo, tú y yo.
SEAMOS NOCHES ETERNAS EN NUESTROS CORAZONES!... SEAMOS VOZ QUE NO SE ESCUCHA!... SONRISA QUE NO SE VE!... SEAMOS TÚ Y YO HOY... Y MAÑANA TAL VEZ LOS DOS SEAMOS UNO... O NADA...
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